La semana del estudiante extranjero comenzó el miércoles. Los casi 50 estudiantes extranjeros fuimos a hacer un especie de city tour por Belo Horizonte que es enorme y está construida sobre morros (lo cual hace que las caminatas sean un infierno), pasamos por los lugares turísticos más relevantes, mientras nos saludabamos y hacíamos las preguntas de rigor -"De dónde sos", -"Qué estudias", etc, En un principio los latinos nos dimos más bola entre nosotros y los europeos se quedaron cerrados, pero después de un par de vueltas, ya estábamos todos mezclados. El que desde un principio sobresalió fue Daniel, un yanqui muy especial, judío, gay y extremadamente sociable, que con su mandíbula prominente se autopresentó en todos los grupos.
Yo moría por hablar con los franceses (Benoit, Sebastien, Florent, Nicolas, Fabien) pero cuando finalmente se decidieron a integrarse, decidí escapar por que el trajín de la manãna los había dejado con un hedor impresionante, lo que le quitaba todo el romanticismo al asunto.
Muy interesante fue conocer a tres chicas de Cabo Verde (Samira, Alice y ...no me acuerdo) que estan aqui por un convenio entre la univiersidad y países africanos para hacer la universidad.
A lo largo de la tarde, las inglesitas con anteojos oscuros se hicieron las divas, mientras las Italianas fumaban cigarrillos de una cigarrera de colores, muy psicodélica, tan linda, que me dio ganas de poner en práctica mi alma de "tucumano gato" en el minuto que la vi.
Los yanquis (Daniel, Mindy, Stephanie y Ross) salen bastante del estereotipo: son muy poco jodones y muy humildes.
Poco a poco nos fuimos haciendo amigos y se armó un grupo bastante copado, tanto que el jueves a la noche ya habíamos arreglamos para salir, todo mentado por los franceses y nosotras.
Esa salida estuvo buenisima, en realidad fue la primera vez que fui al centro sola. Fue medio enquilombada porque el centro está lejos y teníamos que tomar un colectivo en una plaza medio desolada. En el camino se quedaron Virginia y Lina (otra santafesina que llegó el lunes a la moradía) por que les agarró un bizarro ataque de pánico de terminar acuchilladas en la parada. Las valientes (Tania -Portugal-, Valeria, Andrea y yo) llegamos sanas y salvas a Plaza Savasse -un lugar donde estan reunidos todos los bares- ahí estaban los franceses, ya con menos olor, las italianas, las inglesas y los yanquis. Fuimos a tomar caipirinha (las primeras de mi vida, no las últimas, por cierto) en un bar donde pasaban en un televisor algo que puedo definir como "canción punchi punchi de principio de los noventa". Comí un pollo con farofa (una especie de harina, creo) que estaba bastante buena y nos pusimos lo bastante en pedo como para ir buscar un lugar para bailar samba, lo cual fue un movimiento errado ya que terminamos dando vueltas buscando indicaciones como "la tercera gasolinería a la derecha" de todos modos nos recagamos de la risa todo el tiempo.
El viernes al mediodía teníamos un pic nic en el centro deportivo universitario, para el cual, por supuesto, me quedé dormida, y terminé yendo sola en medio del calor de la siesta. El lugar es buenísimo dos piletas, saunas, canchas y no sé que más. Ahí tuvimos mini clases de capoeira, samba y forró (pronúnciese "fojó"). Acá todo el mundo baila, desde el más sanguango hasta el más intelectual, es increible la cantidad de músicas y bailes que los argentinos solemos encuadrar en "música brasilera" que en realidad tienen un montón de matices...
Tengo pruebas de que hice el intento de bailar: una patética foto con uno de los franceses haciendo concurso quien de los dos era más patadura.
El sábado a la tarde volvimos para el centro, para ir a la pileta y ahi nos encontramos de nuevo con los franceses quienes quedaron invitados para el cumpleanõs de Joselino, un chabón de la moradía que estaba ahí con nosotros.
La fiesta fue un descontrol total, en un espacio mínimo había más botellas y vasos de las que jamás vi en mi vida, todo el mundo amontonado saltaba y gritaba. Los europeos estaban en un anexo, cantando a los gritos canciones de Andrea Bocelli. Las italianas también fueron porque lo habían conocido a Joselino en el carnaval de Diamantina (!?!) Las fotos son muy graciosas. También tengo una grabación de los franceses gritando canciones de futbol (aunque en realidad podría ser tranquilamente la marsellesa)
El balance de la convivencia con "todos los países del mundo" es muy positivo.
Yo tuve algunos problemas (y el resto también, en su respectivo idioma) para diferenciar lenguas, porque a los franceses les hablaba en francés pero me salía el portugués al toque, a los yanquis en inglés y también me salía el portugués, y con los hispanoparlantes, exactamente lo mismo. Tenía la sensación de tener puestas mis tres neuronas en funcionamiento en "Portugués Mode" y no poder decir más de tres palabras coherentes en otro idioma. De todas maneras, para todos el Portugués fue la lingua franca. Lo más gracioso quizá fue que hablamos de política, religión, arte, y todo tipo de bobadas en un portugués patético, siempre haciendo uso de gestos y de otras lenguas para hacernos entender.
Yo moría por hablar con los franceses (Benoit, Sebastien, Florent, Nicolas, Fabien) pero cuando finalmente se decidieron a integrarse, decidí escapar por que el trajín de la manãna los había dejado con un hedor impresionante, lo que le quitaba todo el romanticismo al asunto.
Muy interesante fue conocer a tres chicas de Cabo Verde (Samira, Alice y ...no me acuerdo) que estan aqui por un convenio entre la univiersidad y países africanos para hacer la universidad.
A lo largo de la tarde, las inglesitas con anteojos oscuros se hicieron las divas, mientras las Italianas fumaban cigarrillos de una cigarrera de colores, muy psicodélica, tan linda, que me dio ganas de poner en práctica mi alma de "tucumano gato" en el minuto que la vi.
Los yanquis (Daniel, Mindy, Stephanie y Ross) salen bastante del estereotipo: son muy poco jodones y muy humildes.
Poco a poco nos fuimos haciendo amigos y se armó un grupo bastante copado, tanto que el jueves a la noche ya habíamos arreglamos para salir, todo mentado por los franceses y nosotras.
Esa salida estuvo buenisima, en realidad fue la primera vez que fui al centro sola. Fue medio enquilombada porque el centro está lejos y teníamos que tomar un colectivo en una plaza medio desolada. En el camino se quedaron Virginia y Lina (otra santafesina que llegó el lunes a la moradía) por que les agarró un bizarro ataque de pánico de terminar acuchilladas en la parada. Las valientes (Tania -Portugal-, Valeria, Andrea y yo) llegamos sanas y salvas a Plaza Savasse -un lugar donde estan reunidos todos los bares- ahí estaban los franceses, ya con menos olor, las italianas, las inglesas y los yanquis. Fuimos a tomar caipirinha (las primeras de mi vida, no las últimas, por cierto) en un bar donde pasaban en un televisor algo que puedo definir como "canción punchi punchi de principio de los noventa". Comí un pollo con farofa (una especie de harina, creo) que estaba bastante buena y nos pusimos lo bastante en pedo como para ir buscar un lugar para bailar samba, lo cual fue un movimiento errado ya que terminamos dando vueltas buscando indicaciones como "la tercera gasolinería a la derecha" de todos modos nos recagamos de la risa todo el tiempo.
El viernes al mediodía teníamos un pic nic en el centro deportivo universitario, para el cual, por supuesto, me quedé dormida, y terminé yendo sola en medio del calor de la siesta. El lugar es buenísimo dos piletas, saunas, canchas y no sé que más. Ahí tuvimos mini clases de capoeira, samba y forró (pronúnciese "fojó"). Acá todo el mundo baila, desde el más sanguango hasta el más intelectual, es increible la cantidad de músicas y bailes que los argentinos solemos encuadrar en "música brasilera" que en realidad tienen un montón de matices...
Tengo pruebas de que hice el intento de bailar: una patética foto con uno de los franceses haciendo concurso quien de los dos era más patadura.
El sábado a la tarde volvimos para el centro, para ir a la pileta y ahi nos encontramos de nuevo con los franceses quienes quedaron invitados para el cumpleanõs de Joselino, un chabón de la moradía que estaba ahí con nosotros.
La fiesta fue un descontrol total, en un espacio mínimo había más botellas y vasos de las que jamás vi en mi vida, todo el mundo amontonado saltaba y gritaba. Los europeos estaban en un anexo, cantando a los gritos canciones de Andrea Bocelli. Las italianas también fueron porque lo habían conocido a Joselino en el carnaval de Diamantina (!?!) Las fotos son muy graciosas. También tengo una grabación de los franceses gritando canciones de futbol (aunque en realidad podría ser tranquilamente la marsellesa)
El balance de la convivencia con "todos los países del mundo" es muy positivo.
Yo tuve algunos problemas (y el resto también, en su respectivo idioma) para diferenciar lenguas, porque a los franceses les hablaba en francés pero me salía el portugués al toque, a los yanquis en inglés y también me salía el portugués, y con los hispanoparlantes, exactamente lo mismo. Tenía la sensación de tener puestas mis tres neuronas en funcionamiento en "Portugués Mode" y no poder decir más de tres palabras coherentes en otro idioma. De todas maneras, para todos el Portugués fue la lingua franca. Lo más gracioso quizá fue que hablamos de política, religión, arte, y todo tipo de bobadas en un portugués patético, siempre haciendo uso de gestos y de otras lenguas para hacernos entender.
13 comentarios:
"La semana del estudiante que no es tucumano"
¡que mal la estaría pasando ahí!
aunque te envidio
La envidia nunca es buena, mata el alma y la envenena.
hoy me toca a mi preparar la caipirinha (somos pobres, pero tomamos todos los dias)
Yanki, judio, gay y muy sociable...raro personaje Daniel.
La harinita esa que comiste con pollo es muy buena, probala con arroz..siga el baile siga el baile. Hacele probar las empanadas tucumanas a la gente
Clo hace un blog en el que contés tus aventuras sexuales con lujo de detalles, como lola. Te doy una idea: "Clo en Brasil".
Hoy le prometí a una profesora que le iba a mandar la receta de las empanadas TUCUMANAS, que son las mejores (regionalismo fanático aparte), el problema es que no se de donde la voy a sacar!!!
Hi clo! buenas aventuras estas pasando. que no decaiga... Ah. Feliz Cumple. ojo con la caipirinha
Farinha, harina de mandioca cocinada en manteca, a veces le ponen otras cosas (con panceta queda un bombazo), eso es basicamente, en casa la aman, yo nunca la hago..jeje no soy fana de eso, pone seca la comida...Me estaba dando cuenta de dificil que es postear un blog (los flog es mas facil"me paso, pasate" o alguna pelotudez asi) colgado lo ultimo, pero estaba pensando en eso...
Besos niñas y clo feliz cumple atrasado (toy sola en casa, no prendi la maquina ayer...
Aloje un par de veces a un frances en mi casa, y debo admitir que tenia un olor particular, tal vez sea el aroma de la cultura y la civilizacion avanzada, o tal vez sea el olor de unas costumbres higienicas un tanto deficientes sumado a un clima subtropical al que no estan acostumbrados
Uno de ellos es muy limpio.
El otro día a alguien se le escapó un comentario sobre el tema y él, después, le preguntó a la Vale, muy acongojado, si todos pensabamos así, ante la respuesta afirmativa, dijo que no sabía que esa era su fama, que él se bañaba dos veces al día, que no entendía. Me dio mucha penita.
solo una pregunta que los argentinos no transpirais?
oleis a rosas todo el día?
porque lo que dices del hedor de los franceses me ha indignado ...... y no soy francesa
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